La educación es el pilar fundamental sobre el cual se sostiene el futuro de las crecientes generaciones. Es por esto que, como diputados debemos asumir un compromiso con nuestros jóvenes para defender el derecho de éstos de acceder a un sistema educativo de calidad, sin importar su estatus económico. En ese sentido, hemos propuesto iniciativas que buscan reforzar y mejorar los programas y competencias del currículo educativo dominicano, específicamente en materia ambiental. Entre estas se encuentra el ‘‘Proyecto Piloto de Gestión de Residuos y Educación Ambiental’’.
Esta iniciativa tiene como objetivo aunar esfuerzos entre el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales y el Ministerio de Educación, para dar cumplimiento a la tan necesitada Ley de Educación y Comunicación Ambiental. Su finalidad es comenzar a fomentar desde la educación escolar, el manejo correcto de los recursos y proveer herramientas prácticas para la educación ambiental utilizando Puntos Verdes Didácticos.
Este piloto tiene como miras comenzar en la provincia de Santiago, la cual cuenta con actores estratégicos (CILPEN GLOBAL, APEDI y el CDES), y experiencia previa, a través del primer Punto Verde Didáctico del País, ‘‘Los Pepines’’. Estos factores facilitarán el desarrollo del programa, permitiendo a las entidades contar con los datos necesarios para que sea expandido a todo el país, como una estrategia para concientizar a las crecientes generaciones sobre la importancia de cuidar el medio ambiente y gestionar de manera adecuada nuestros recursos naturales.
El proyecto fue presentado el pasado mes de julio a la viceministra de Cooperación Internacional, Milagros De Camps, a la Directora de Educación Ambiental, Andrea Taveras, y el Director del Programa de Residuos Sólidos, John Grullón, quienes en representación del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, dieron un visto positivo a la iniciativa. En adelante apostamos para que estos y el Ministerio de Educación, puedan llegar a acuerdos favorables para dar inicio al programa, como un paso de los muchos que harán falta para lograr nuestra meta país: proveer a las futuras generaciones un medio ambiente sano.
El futuro depende de lo que hoy hacemos para promover un mejor mañana. Actuar en el presente en favor del medio ambiente, pensando en los beneficios a largo plazo, es la mentalidad que como diputados intentamos asumir. Los beneficios inmediatos son efímeros, invertir en nuestros jóvenes, es hacer una inversión segura para el país que soñamos.
Cuidar el medio ambiente es una responsabilidad de todos, y la educación ambiental es la vía más segura para garantizar un futuro más verde. Los niños, niñas y adolescentes dominicanos tendrán un porvenir sostenible si nosotros como legisladores, y como gobierno, garantizamos mecanismos prácticos de aprendizaje a su alcance, la escuela es el mejor lugar para sembrar semillas de conciencia ambiental.